Antiguamente era común pensar que una mujer embarazada no debía hacer ninguna clase de ejercicios. Muchas investigaciones y experiencias han demostrado que esta costumbre no tenía ningún fundamento sólido. Claro está, tampoco es que una mujer embarazada vaya a ponerse a levantar pesos desmedidos. Los ejercicios de pilates en el embarazo no son excluyentes todo lo contrario, hacen mucho bien al estado de gravidez.

El embarazo produce cambios físicos en las mujeres y la práctica del método Pilates ayuda a llevar con bien, todas las presiones que deben soportar las mujeres en período de gestación. Si quieres un ejemplo básico, debes saber que les ayuda a mantener las vértebras de la zona lumbar y la pelvis en una posición adecuada. Y esto es más evidente durante los últimos meses del embarazo.

Estos ejercicios te ayudan a reducir los dolores que por lo general se sienten en la espalda baja y la pelvis. Su práctica te ayuda a tonificar y repotencia esas zonas que tienen que tienen que soportar no solo el peso de bebé en crecimiento continuo a lo largo de los nueve meses sino la transformaciones que sufre tu cuerpo en ese lapso. Además te ayuda a fortalecer tu pecho y a hacer más elásticos los músculos del abdomen.

Los pilates y el embarazo

el pilates y embarazo

El embarazo tiene demandas físicas para la mujer, pero también le plantea exigencias de orden mental que guardan relación con el control del cuerpo y sobre todo, de los músculos que circundan el área genital. Los ejercicios del pilates en el embarazo te ayudan en ambos sentidos, además de mantener activos todos los músculos de la zona, te asiste mentalmente en la medida en que te enseña a controlar tu cuerpo de manera consciente.

En principio, y si hablamos de los aspectos físicos, muchas mujeres pueden llegar a sentirse a sentirse limitadas a causa de los cambios que sufre su cuerpo. Estas modificaciones pueden hacer que pierdan mucho de su elasticidad y por otro lado, les resulta penoso mantener la postura erguida y esto presiona su condición psíquica a medida que se acerca el momento del parto. Los ejercicios del pilates te asistirán eficazmente a lo largo de todo el período.

¿Cómo actúan los Pilates durante el embarazo?

Es recomendable que comiences a practicar los ejercicios del pilates cuando las primeras incomodidades provocadas por tu embarazo empiecen a ser tolerables para ti. Esto suele ocurrir después del primer tercio del período. Por supuesto, necesitarás la aprobación de tu médico para empezar. Sin embargo, puedes estar segura de que en condiciones normales, pilates y embarazo son una buena junta.

Los ejercicios del pilates te ayudan a mantener en altas condiciones de elasticidad todos aquellos músculos ligados al alojamiento y crecimiento de tu bebé. Hacen posible que tu área pélvica asuma y mantenga una postura adecuada con respecto al peso que vas acumulando y a la condición erecta que tu columna vertebral debería mantener en todo momento. Fortalece tanto tus músculos abdominales como aquellos con los que se sostiene tu espina dorsal.

Si te toca hacer los ejercicios del pilates, cuando menos en los últimos tres o cuatro meses del embarazo, es muy probable que no tengas riesgos de sufrir de hipertensión, varices, dolores reumáticos, infecciones urinarias, acumulaciones de líquidos, etc. Sin embargo, es bueno que sepas que si padeces de hipertensión o de alguna clase de padecimiento cardíaco, contracciones prematuras de parto o sangrado, no deberías hacerlos sin autorización médica

¿Qué beneficios de proporcionan los pilates a las embarazadas?

Durante el embarazo, al aumentar el peso de la mujer se desarrollan cambios que derivan en mayor esfuerzo para determinados grupos de músculos. Robustecer los músculos ligados a la columna vertebral te ayudará a disipar las molestias comunes al embarazo. Y además, también te ayudarán enormemente a los largo del proceso de tu recuperación después del parto. Entre muchas cosas, te mejora y regula tu sistema cardiovascular.

Siempre será necesario que los ejercicios se apliquen en función de las condiciones en las que se encuentre la practicante en cada etapa de la gestación y por supuesto se debe estar atento a las modificaciones de los niveles de energía se producen cada día.

Desde el punto de vista de funcionamiento de corazón y venas

  • Normaliza tu ritmo cardíaco.
  • Optimiza la circulación sanguínea.
  • Disminuye la posibilidad de la aparición de varices.
  • Alivia tu tensión.

Desde el punto de vista del estado de tu cuerpo y tus músculos

  • Optimiza y vigoriza el conjunto de tus músculos.
  • Disminuye la aparición de calambres.
  • Favorece la adopción de una mejor postura.
  • Disminuye considerablemente los padecimientos lumbares.
  • Impide el aumento descontrolado de tu peso.
  • Te promete una mejor condición física.
  • Aminora la tan desagradable celulitis en gran medida.
  • Aminora la retención de líquidos en tus piernas.

Desde el punto de vista de tu aparato digestivo

  • Regula el Sistema Digestivo
  • Disminuye flatulencia y gases
  • Reduce el estreñimiento.

Desde el punto de vista de tu bienestar mental

  • Optimiza las condiciones de tu funcionamiento psicológico.
  • Elimina las sensaciones de fatiga, la depresión y hasta te ayuda a dormir plácidamente.
  • Elimina la sensación de ansiedad.
  • Te quita de encima las molestias del estrés.

Los inconvenientes del pilates durante el embarazo

practicar pilates para embarazadas

Existen situaciones en las que los ejercicios del pilates no son recomendados o permitidos en las mujeres en estado de gravidez. Puede ser el caso de algunas mujeres que padecen enfermedades serias o delicadas por lo que pudieran acentuar la posibilidad de impedir la finalización de su embarazo.

  • Hipertensión provocada por el embarazo.
  • Fractura anticipada de membranas en la mujer y que exista la posibilidad de un parto prematuro.
  • Que se esté padeciendo de diabetes.
  • Alguna enfermedad cardiaca heredada.
  • Padecimiento de alguna enfermedad pulmonar (como la tuberculosis).

Los pilates y el conocimiento del cuerpo

A través de la práctica de los ejercicios del pilates, las mujeres en estado de gravidez serán capaces de conocer mucho mejor su cuerpo y aprenderán a percibir permanentemente sus señales. Asimismo va a aprender a controlar mucho mejor tanto sus músculos como sus movimientos con lo que el trabajo de parto pudiera hacerse más fácil y rápido.

Aparte de todos estos beneficios, el hecho de aprender a controlar y dirigir la respiración (elemento clave de los pilates) es un detalle importantísimo en la situación de parto. Hay que recordar que uno de los asuntos fundamentales del momento del nacimiento de un bebé está en la relación de la respiración con los movimientos y el esfuerzo pélvico del momento. En consecuencia, el parto se hará mucho más fácil y fluido.

Y en el período postparto…

Tendrás una rápida recuperación física durante el postparto, tu zona abdominal estará en mejores condiciones de volver a la normalidad.
Los malestares de orden mental se verán enormemente aliviados como producto de la poderosa sensación de bienestar físico.