Los ejercicios de yoga y los del pilates (sobre todo los ejercicios que se hacen sin accesorios) tienen muchos detalles en común. En principio, tienen algunos propósitos similares (aunque no idénticos) y aparte de esto, algunos de los fundamentos de sus prácticas también tienen mucho parecido. Tal vez te estés preguntando ¿si no existen demasiadas diferencias entre yoga y pilates, entonces, cuál elegir?
Para poder precisar cuáles son las diferencias esenciales entre ambas disciplinas podemos empezar atendiendo a las peculiaridades de cada una de ellas. Es una afirmación generalmente aceptada que el yoga guarda una mayor relación con la elasticidad y la flexibilidad, mientras que los ejercicios del pilates se relacionan más con la fuerza. Los practicantes del yoga no están a la búsqueda de un deporte o paquete de ejercicios buscan sí, una forma de vida.
Tal vez sea necesario tener presente que el yoga es una disciplina que tiene miles de años de existencia, que se originó fuera de las fronteras culturales del mundo occidental y que está constituida como una disciplina de carácter filosófico, místico y cuasi religioso. En contraste, los pilates tienen a lo sumo cien años de haber sido forjados y aparecen en el horizonte como una disciplina con una perspectiva netamente occidental.
Las principales diferencias entre practicar yoga y pilates
El método de ejercicios pilates fue concebido con la intención expresa de salvar una serie de limitaciones físicas que eran padecidas por su creador. Sus principios no tenían nada que ver con planteamientos filosóficos o místicos de ninguna clase, mucho menos religiosos. Estuvieron fundados en pensamientos o ideas totalmente laicas y terrenales y cuando más lejos, en sentimientos existenciales asociados a las debilidades físicas de su creador.
Si los miras bien, ambos tipos de ejercicio son prácticas que tienen un bajo impacto y los pueden hacer en cualquier lugar. Lo único que pudieras necesitar para ejercitarte sería una colchoneta o estera. Para el caso de los pilates, tendría que ser un tanto más gruesa pues necesitarás una mayor protección en el caso de ejercicios en el suelo. La estera del yoga necesita ser antideslizante para evitar desplazamientos en las posturas de pie.
El yoga y la espiritualidad
El yoga se originó en la India y los primeros yoghis iniciaron el desarrollo de esta disciplina buscando la paz interior y la desconexión del mundo material. Sus practicantes siempre han tenido como su objetivo central liberarse de las amarguras que el mundo material genera en todos y cada uno de los seres humanos.
Su meta final ha sido encontrar, forjar o establecer conexión con una consciencia superior para la superación definitiva del ciclo de las reencarnaciones. Esos principios ya te están hablando claramente de algunas diferencias entre yoga y pilates.
La práctica del yoga tiene muchas intenciones directas y te produce una gran cantidad de beneficios tanto en el mediano como en el largo plazo. Toda su “rutina” se lleva a efecto alrededor de posiciones (asanas), ejercicios de respiración profunda (pranayama) y la meditación. Y su meta más importante es que alcances una vinculación y/o unión plena entre tu cuerpo y tu mente; te vale para erigir una perfecta unidad entre ambas entidades.
En términos generales, la práctica del yoga representa para ti la consecución de dos grandes tipos de beneficios:
- Te genera beneficios físicos casi inmediatos.
- Asimismo te genera beneficios mentales de gran importancia.
Yoga significa e implica Unión
El yoga es una disciplina física y mental tradicional dentro de la cultura india. El término yoga siempre ha estado asociado con la práctica de la meditación tanto en el hinduismo como en el budismo y el jainismo. Desde el punto de vista de quienes lo practican, el yoga te genera como producto,
- La unidad entre el alma individual y una especie de divinidad que se identifica como Brahman, Shiva, Vishnu, Kali, etc. Esto ya le confiere un carácter religioso particular.
- El discernimiento de que eso que se llama el ‘yo’ es una entidad espiritual y no material.
- Un enorme bienestar tanto físico como mental, nacido de la unión fluida entre tu mente y tu cuerpo.
El yoga es una disciplina que aspira establecer una conexión permanente entre tu cuerpo, y tu mente teniendo como intermediaria la respiración. Se vale de posiciones del cuerpo (asanas), de ejercicios de respiración consciente y de la meditación para mejorar tu salud en general. En el ámbito occidental, la mayor parte de las personas toma el yoga como un tipo de ejercicio para reducir el estrés. Y además pretende alcanzar otros beneficios físicos concretos como:
- Fortalecer e incrementar la resistencia de músculos y huesos.
- Equilibrar el sistema nervioso integral.
- Mejorar la forma de respirar pues el yoga te enseña a respirar correctamente.
- Reforzar tu sistema inmunológico.
- Incrementar tu elasticidad.
- Mejorar e incrementar tu equilibrio.
Todo esto es cierto pero, en el caso del yoga sus elementos de carácter físico son tan solo una parte efectivamente mínima de la disciplina. En el yoga, las posturas (asanas) se van desarrollando desde tus extremidades (las manos, los brazos, los pies y piernas) hacia el centro de tu cuerpo.
Por otro lado, la práctica del yoga abarca ese componente de orden espiritual que la persona va a alcanzar mediante la práctica de las posiciones (asanas), orientadas a conseguir un modo de vida más equilibrado y libre. Asimismo, la filosofía en el yoga está enfocada en alcanzar la paz espiritual usando la relajación y las posturas corporales como el vehículo idóneo.
El método pilates, la fuerza física y mental
Los ejercicios del pilates son bastante más diferentes. Con ellos no se trata de una búsqueda de tipo espiritual sino de sanación y rehabilitación. La génesis de los ejercicios pilates se encuentran en el ámbito de la I guerra mundial. Su creador desarrolló su método como un recurso para ayudar a sanar los cuerpos de personas que se encontraban en cama, lesionadas durante la guerra.
Por otro lado, los propios padecimientos físicos de su inventor fueron un motor de igual o mayor peso para pensar en los modos de superar sus limitaciones corporales. Con el paso del tiempo y en relación con cada nueva circunstancia, se fue convirtiendo en una técnica de entrenamiento personal con excelentes resultados para todo tipo de personas. Como ves, aquí tienes otra diferencia entre yoga y pilates de consideración.
Siempre tuvo como objetivo el desarrollo de un ejercicio integral, que sirviese para establecer una conexión fluida entre tu respiración, la potenciación de tu energía muscular y el ejercicio de un control mental sobre el cuerpo. Los conocimientos de anatomía y de los movimientos del ser humano fueron inspiración para el diseño del método Pilates.
Bondades curativas de pilates
Uno de sus criterios básicos es la posibilidad de efectuar los ejercicios en función de las cualidades físicas de cada persona. Esto quiere decir que sea cual sea tu condición física puedes practicar pilates. Si padeces de dolencias en tus articulaciones te sirven, si tienes malestares musculares, te sirven. En términos generales, procuran ayudarte a fortalecer esos miembros que en alguna medida, se encuentran dañados.
- Como el yoga, sus ejercicios se realizan pausadamente y de manera muy controlada. Esto ayuda a las labores de regeneración física de las personas que sufren de dolores de espalda o algún tipo de lesiones en la espina dorsal, se centra en la respiración y la alineación de la columna, la postura del cuerpo y la flexibilidad muscular.
- Es un ejercicio de no impacto, esto hace posible que los practiques sin correr el riesgo de lesionarte. Resulta perfecto para incrementar tu fortaleza física y tu capacidad respiratoria.
- A través de la respiración profunda, favorece la oxigenación de tu organismo y junto al trabajo muscular ayuda a acelerar tu metabolismo y apoya la expulsión de toxinas.
- Un metabolismo acelerado te ayuda a perder peso de manera progresiva. Por otro lado, mejora el uso de tu energía y el desgaste calórico.
- Tus músculos adquieren una forma muy definida y consistente, sin que esto signifique un crecimiento en volumen. Le darás forma a tu cuerpo y resaltarás tu figura.
- Te ayudan a optimizar la posición que adoptas regularmente tanto de pie como sentado. Alinea tu columna y permite mejorar y sostener tu estructura ósea. Tonifica tu abdomen, los músculos dorsales, las piernas y glúteos.
- Al ayudarte a mejorar la distribución de tu peso, reduce las exigencias que reciben huesos y músculos y te sientes mucho más estable en la posición erguida.
- También apoya el funcionamiento de tu sistema nervioso. Al tener mayor control mental sobre tus movimientos, tu fuerza, tu equilibrio y tu respiración, el cerebro disminuye su estado de tensión habitual y con ello se reducen tus niveles de estrés de manera notoria.
- Te ayuda a mejorar tu vida sexual. En la medida en que fortalece los músculos de tu pelvis, hace posible experimentar relaciones sexuales más gratificantes.
- Y una cosa mejor es que te ayudar a elevar tu autoestima. Te sentirás más a gusto contigo mismo.
Semejanzas y diferencias entre yoga y pilates
Ambas disciplinas tienen en común, te sirven para reducir o eliminar el estrés y repercuten beneficiosamente en tu salud mental y corporal. Cuando le preguntas a los profesionales acerca de las diferencias entre las dos disciplinas, te dan una respuesta que ya conoces, es decir suelen hablarte más de las semejanzas que de las diferencias y agregan “son ejercicios de bajo o nulo impacto”.
Igualmente te comentan que el yoga tiene mucho más que ver con la elasticidad mientras que los pilates se ocupan más de la fuerza; ciertamente sostienen que ambos están muy vinculados al incremento de tu estabilidad tanto física como mental. De modo que si te toca elegir entre una y otra disciplina, la respuesta la vas a encontrar en lo que pretendes alcanzar con cualquiera de ellas, cuál se adecua más a tus características, a tu personalidad o a tus creencias.